La mordida abierta es una patología muy común que tradicionalmente se ha tratado mediante cirugía maxilofacial combinada con ortodoncia en las fases adultas. En este artículo veremos cómo podemos evitar el quirófano con las técnicas más modernas que ofrece la ortodoncia actual. Además, hablaremos de las características, los tipos y las causas y consecuencias de dicha patología.

¿Qué es la mordida abierta?
La mordida abierta es la ausencia de contacto entre algunos de los dientes del maxilar superior e inferior al morder. Esta patología hace que las fuerzas de masticación se concentren en los dientes que sí contactan entre sí, generando su desgaste, la pérdida del hueso que los sujeta y sobrecargando la articulación que une a los maxilares (articulación temporomandibular). Además, pueden ocasionar otras patologías que detallamos a continuación:
- Problemas digestivos: será más complicado triturar los alimentos dada la falta de contacto entre dientes, provocando que, o bien el estómago tenga que trabajar más, o bien que tengan que hacerlo los dientes que sí contactan entre sí.
- Problemas de fonación: A veces cuesta pronunciar algunas letras por el exceso de aire que se va por la zona donde no contactan los dientes.
- Deglución atípica: Cuando se ingieren los alimentos o la saliva (proceso de deglución), el cuerpo contrarresta la ausencia del contacto entre los dientes situando la lengua en el espacio que hay entre los mismos. La fuerza de la lengua empuja los dientes hacia afuera, acentuando la mordida abierta.
- Dolor muscular facial: En los casos de mordida abierta, se sobrecargan los músculos masticatorios situados en las zonas donde sí hay contacto dental, pudiendo ocasionar dolor y afectando la función de dichos músculos.
La principal causa de la mordida abierta es la genética, aunque los malos hábitos como la respiración por la boca o la succión del pulgar en fases juveniles o infantiles, pueden afectar al correcto desarrollo de los maxilares y generar la falta de contacto entre dientes.
Tipos de mordida abierta
La mordida abierta se clasifica según la zona y el origen de la patología:
Zona de falta de contacto:
- Mordida abierta anterior: se da cuando la ausencia de contacto dental al morder está en la zona entre los incisivos superiores e inferiores (dientes de delante).
- Mordida abierta posterior: se da cuando la ausencia de contacto existe entre los molares (dientes posteriores). Si se produce en uno de los lados, hablaremos de mordida abierta posterior unilateral, mientras que si se produce en ambos lados, la llamaremos mordida abierta posterior bilateral.
Origen de la patología:
- Mordida abierta esquelética: se da cuando la causa de la patología la produce el crecimiento divergente de los maxilares, es decir cuando el desarrollo de dichos huesos que soportan los dientes no es proporcional entre sí, generando la falta de contacto entre varios dientes.
- Mordida abierta dental: Se da cuando la malposición de los dientes es la causante de la falta de contacto entre ellos, es decir cuando los dientes están inclinados o no han erupcionado correctamente.
- Mordida abierta causada por problemas en la articulación temporomandibular (ATM): Hay pacientes que presentan problemas en la articulación que une los dos maxilares y que pueden causar la falta de contacto dental.
Tratamientos para la mordida abierta:
Si tratamos la mordida abierta en fases juveniles o infantiles el tratamiento será más sencillo, pues el hueso que sujeta los dientes es más moldeable. De todos modos, las técnicas de ortodoncia actuales nos permiten tratar la patología en adultos en la mayoría de los casos sin tener que combinar la cirugía maxilofacial.
Si la mordida abierta se da por la mala posición de los dientes, reposicionándolos con un tratamiento de ortodoncia será suficiente para resolverla. Si por el contrario, el origen es esquelético (falta de simetría de los maxilares), se podrá tratar a través de la ortodoncia y el uso de microtornillos, unos pequeños tornillos que irán anclados al hueso y en los que colocaremos unas gomas que irán desde los microtornillos a un soporte que adheriremos a la superficie del diente (en el caso de ortodoncia con Brackets se sujetarán a los mismos brackets, ver foto). De este modo lograremos mover los dientes de forma vertical, o bien intruyéndolos (adentrando el diente en el hueso) o bien extruyéndolos (el movimiento contrario) según la planificación del caso.

Habrá que medir a la perfección la velocidad en que podemos realizar los movimientos y hasta donde podemos posicionar el diente respecto al hueso que lo sujera para que el resultado sea funcional.
Para ello, previamente al inicio del tratamiento, realizaremos una planificación digital a través de fotografías, imágenes óseas en 3D y imágenes de las encías y dientes en 3D que registraremos con nuestro escáner y TAC digitales. Nuestra tecnología dental nos permitirá sobreponer dichas imágenes para poder planificar correctamente el tratamiento y presentar una simulación virtual al paciente.
Para tratar correctamente la mordida abierta habrá que analizar también si hay algún hábito que la esté alimentando como la succión del pulgar, el posicionamiento de la lengua entre los dientes o la respiración constante por la boca. En estos casos habrá que combinar el tratamiento ortodóntico con el de un otorrino y/o logopeda para reeducar el hábito y así evitar que se alargue el tratamiento.
Además, deberemos tener muy controlado el sistema de retención posterior al tratamiento para mantener los resultados, ya que la mordida abierta tiene riesgo de recidivar. En el 80% de los casos la recidiva se produce en el primer año post tratamiento y en el 20% de los casos en el segundo año. Es por ello que desde nuestra clínica dental hemos desarrollado un protocolo específico de retención que nos ha permitido evitar la recidiva en todos nuestros tratamientos. Lo detallamos a continuación:
- Seguimiento en la reeducación de los malos hábitos que puedan favorecer la mordida abierta.
- Ejercicios musculares para reforzar los músculos masticatorios.
- Según la complejidad del caso, se mantendrán las gomas entre los dientes y los microtornillos entre 6 y 12 meses post tratamiento para mantener la corrección de la mordida.
A continuación mostramos una secuencia de fotos de un caso de mordida abierta resuelto por nuestro especialista en ortodoncia, el Dr. Abboud, actualmente profesor del máster de ortodoncia en la Universidad de Barcelona y reconocido por ser uno de los ortodoncistas que más resuelve casos complejos de forma exitosa evitando la cirugía.